miércoles, 8 de mayo de 2013

Mi pasión



Escribir es una pasión, y como toda pasión absorbe, obnubila y desmadeja.  Esta pasión mía se nutre de historias. No hace falta ir a por ellas, es la historia la que nos encuentra a nosotros.
Hace unos años una historia me atrapó para siempre.  Sucedió cuando aún era muy pequeña pero sus ecos se remontan hasta hoy en día. Los hechos conforman una perfecta novela policiaca que ocurrió de verdad, más fantástica aún que la propia realidad, pues los hechos y los sucesos que acaecieron posteriormente formaron un puzle aún indescifrable para mí.
Comienzo a tirar del hilo y a preguntar, al modo socrático, y encuentro miedo entre las gentes comunes, un miedo soterrado y oculto. Esto, lejos de ahuyentarme me da más valor aún. Entonces comienzo desentrañar el enmarañado  de hechos que ocurrieron y aparecen muchos nombres, y una historia soterrada de violencia e injusticia que llega hasta el fondo mismo de la sima de Jinámar.
Me debo a mi pasión como me debo a mi misma, sólo tengo ojos para ellas: leo sobre el tema, indago, investigo, pregunto, me informo con los testigos vivos que aún quedan de aquella historia. Y escribo, tejiendo esta tela de araña; destejer, descifrar conocer, para luego crear, inventar, reescribir lo que pudo ser y no se dijo, lo que se calló y lo que está aún por decir.
Nada sucede al azar. Últimamente tiendo a tener un pensamiento mágico e infantil, como yo mima, y es este: cuando tienes un sueño el firmamento se confabula para que este se realicen.
Una serie de aciertos, de intuiciones, de casualidades me llevan de mano en mano por esta novela oculta que está aflorando.
Y no tengo tiempo para más. El tiempo pasa volando, y estamos en la recta final del curso, entre esto y las obligaciones diarias,  las horas de ocio son pocas para ponerme en lo que me apasiona.
Esta entrada, ya lo sabían, es sólo a modo de disculpas para justificar mi ausencia o poca concurrencia por este blog. No es por falta de interés sino de tiempo y de una pasión que me absorbe.
 Por lo demás, todo bien. 

13 comentarios:

emejota dijo...

Gracias por contárnoslo, mira que no suelo leer novelas, pero mira tu que la tuya, caerá, vaya que si caerá, porque me encanta cómo escribes. Mucho ánimo Ico, adelante y toda la fortuna del mundo. Bsss.

TORO SALVAJE dijo...

Por una pasión así no sé lo que daría.

Te envidio.

Besos.

ISA dijo...


Cuando era pequeña ya leía mucho y siempre soñaba con ser escritora de ficción.
De hecho siempre era la primera en narraciones y mis trabajos en la universidad eran bastante elaborados.

Y cuando tenía unos 30 años o así empecé a escribir relatos cortos y cosas por el estilo. Y me di cuenta de que no, que no sirvo para escribir ficción, creo (a estas alturas) que ni siquiera me gusta.
Quizá por deformación universitaria, a mí lo que se me da de miedo es comentar y/o criticar la obra de los demás.
Estoy segura de que, de haberme dedicado a ello de haber podido, hubiera sido una estupenda crítica literaria (no, no tengo abuelas ni abuelos.
Y esto no es que sea bueno. Siempre me acuerdo de Camilo J. Cela (al que detesto), en una conferencia en la universidad cuando dijo algo así como que "... los críticos literarios son escritores frustrados...". Aunque el Cela admitía mal pero que muy mal las críticas a su obra, cuando me acuerdo de su frase no dejo de pensa que, en el fondo, es más que posible que tuviera razón.

Por otra parte, es estupendo que tengas una "pasión", eso es vida, adelante con ella y que la suerte te sonría ¡¡¡.

Arte en Madrid. Tíltide dijo...

¡Felicidades! Nada mejor que lo que hoy te pasa. Un abrazo.
Matilde.

Susana Peiró dijo...

Querida Profe: estás en ese puntito exacto donde un escritor se abre a la magia. Es verdad que nada sucede por azar y también es real que nuestra voluntad poco y nada tiene que ver con esa “serie de aciertos, intuiciones y casualidades” que llevan a desarrollar esa novela.
Dale bandera verde a la pasión, permitile fluir, cedele el timón.
Mientras, un abrazo, lleno de confianza en Vos.

Lenteja dijo...

Las pasiones, es lo que tienen oyes.
Besos.Lenteja

maslama dijo...

pues nada, las pasiones como los vicios hay que cuidarlas, que de lo contrario se pierden :))

besos,

Esilleviana dijo...

Estas leyendo novela negra, no?
jajaja
El simple arte de matar o novelas policíacas, guiadas por la experiencia de un inspector o policía fracasado y desencantado por toda la burocracia y la maquinaria democrática...

un saludo cordial

Anónimo dijo...

;)

natsnoC dijo...

Suerte y ojalá esa pasión fructifique.

A mi siempre me han animado a que escriba pero me cuesta taanto escribir cuatro párrafos con sentido, soy un crítico tan sumamente feroz conmigo que al final me planto.

Rosario Valcárcel dijo...

Hola amiga: He perdido tu correo y Luis no lo encuentra tampoco ponte en contacto conmigo a través de mi blog-rosariovalcarcel.blogspot.com
o a través de mi correo, que ya te aparece por gmail.

Espero noticias, mientras, seguiré mirando tu blog que me parece muy interesante.

Rosario Valcárcel dijo...

Ah, tampoco sé si estas en el feis, dime algo, plis.

Maga h dijo...

Linda, que vida tan llena de sentidos la tuya. No sé acabaran jamás las historias, no te habrán de abandonar. Hay mejor compañía? Te quiero