jueves, 11 de diciembre de 2014

Los Juan Haldudos



D. Quijote en su afán de vivir aventuras y ayudar al pobre y menesteroso se encuentra en su primera aventura con un joven criado que está siendo azotado por su amo. El caballero de la hidalga figura le reprende y obliga al injusto labrador a que suelte al muchacho. El muchacho agradecido aprovecha para contarle al caballero que su jefe no  le ha pagado hace meses su soldada.  Don Quijote le hace prometer al labrador que nada más llegar a su hacienda le pagará el sueldo al joven. El joven atónito al saber que aquel extraño caballero confía en la palabra  que le ha dado el labrador, le dice que no se fíe, que es Juan Haldudo, el rico, el vecino de Quintanar.  A lo que responde don Quijote.
-        Importa poco eso- respondió Don Quijote- que Haldudos puede haber caballero,; cuanto más, que cada uno es hijo de sus obras.
-        Así es verdad- dijo Andrés, pero este es mi amo, ¿ de qué obras es hijo , pues me niega mi soldada y mi sudor y trabajo?
De esta forma Cervantes reconoce que en el ser humano no importa su origen o familia sino “las obras “ es decir, lo que cada cual en vida de este haga.  Así el joven se defiende diciendo que aquel labrador no ha hecho “ninguna obra” pues no le paga su sueldo.
Cervantes nos advierte así que justicia y la igualdad son principios éticos y morales inherentes a una persona de bien. D. Quijote da un cachete a esos hidalgos y caballeros que se vanaglorian de su estirpe pero que luego son injustos en el trato a los demás. Reconoce así que no se es persona de honor quien no actúa de acuerdo a los principios de justicia. ¡Cuántos Juan Haldudos hay en esta época que creyéndose hijos de algo no lo son más que de sus miserias.

El criado nada más irse volvió a ser golpeado con más saña por el labrador como hacen sin piedad todos los Juan Haldudos de este planeta cuando se encuentran solos. Porque los Juan Haldudos tampoco tienen palabra ni nada que se le parezca.

4 comentarios:

Pitt Tristán dijo...

Fernando Cubells solía decir que "las cuestiones de nombres son también cuestiones sobre cosas", y por eso importa tanto aclarar de qué hablamos cuando utilizamos la palabra "ética". Como bien sabes, viene del griego, de éthos, que quiere decir "carácter", y, en ese sentido, la ética está relacionada fundamentalmente con la forja del carácter de las personas, que es la asignatura más importante de nuestra vida. Parece que nuestra educación, hace ya bastntes, muchos años, no va dirigida en esa dirección.

cereza dijo...

Por lo mismo que no es lo mismo aristocracia que nobleza. La nobleza vestida con harapos siempre será noble, la otra aunque la vistan de seda...

maria candel dijo...

Pasan los años y el Quijote y su autor Cervantes, son tan actuales como si hubieran sido escritos hoy, el ser humano, en esencia, parece que no cambia mucho con los años..., parece que no aprendemos...

Muy oportuna tu reflexión, Ico, besos

TORO SALVAJE dijo...

La miseria moral nos gobierna.
Por desgracia.