viernes, 9 de septiembre de 2011

No me llames amor


No compres libros, no hagas caso de las recomendaciones de los libreros, no me hagas caso a mí si quieres. Pero por dios no llames literatura a la basura. Las librerías están llenas de libros de consumo rápido pero infumable para alguien que aprecie la buena literatura. Si lo que buscas es un entretenimiento pasajero mejor será que mires una serie de televisión y no confundas consumo publicitario con literatura. Y es que últimamente rebosan los estantes de las librerías de novela hechas por guionistas o payasos de turno tipo “Maldita Karma” una mezcla de libro de autoayuda para amas de casa estresadas y pseudonovela rosa y que encima dicen que es entretenida. A mí en cambio me produjo una constante sarna, ya sé soy rara, creo producto de mis rabieta al comprobar cómo se puede escribir tan mal tantas tonterías juntas y conseguir encima que en el boca a boca se hable bien de este libro.

Sí, en cambio me reí y me entretuve, si la cosa va de entretenimientos pasajeros con “La hija de Rober Poste” de Stella Gibbons, hilarante novela por momentos. Cuenta la llegada de una señorita de ciudad a principio de siglo a un entorno rural y embrutecido. Diálogos rápidos e inteligentes que no ahorra esfuerzos en criticar a novelistas pedantes de la época.

Así que, insisto, no compre libros que estamos en crisis, acuda urgentemente a su biblioteca de barrio, a sus círculos de amigos, a sus compañeros de trabajo que le prestarán buenos e irremediablemente malos libros.

Los mejores libros se encuentran olvidados en bibliotecas o en tiendas de segunda mano. La verdadera literatura no es fácilmente consumible porque nos golpea directamente a los sentidos o a nuestro cerebro anquilosado, nos plantea dudas, nos trastorna el universo, nos hace pensar y meditar sobre nuestra vida. Como sucede con Resurrección de Tolstoy, una genial novela. Un hombre de clase media alta toma conciencia después de conocer las consecuencias nefastas que ha producido un error de juventud en una mujer, de la vacuidad de su vida, de la decadencia de ésta y decide repararla. Se dedica entonces a visitar cárceles y a contemplar la vida de los miserables que allí viven. Una reflexión moral y crítica sobre la sociedad y el sistema que genera, un ejercicio de comprensión sobre las motivaciones humanas y el cinismo en el que se fundamentan nuestros principios éticos. Temas claro está, la moral, la ética, que no están de moda, que no se plantea en las novelitas publicistas de medio pelo, tal como los principios morales, el compromiso del ser humano con los demás y con su entorno.

Este riesgo del autor, este dejarse la piel en la defensa de sus ideas, esta audacia y sobre todo esta profundidad y compromiso es lo que diferencia, sin entrar ya en la calidad literaria, a una gran novela de un simple entretenimiento o un marketing publicitario.

15 comentarios:

Desviada dijo...

Me encantan los libros de segunda mano, y es cierto que la buena literatura se encuentra en tiendas pequeñas y con olor a viejo.

Apunto el libro que recomiendas, lo buscaré por Iberlibro, que seguro que lo encuentra.

Por cierto, un libro con buenas reflexiones sobre valores, moral,justicia...y actual, que te recomiendo:

http://www.casadellibro.com/libro-justicia-hacemos-lo-que-debemos-/1820717/2900001418167

cereza dijo...

He leido tantos libros,tantos, buenos, malos, malísimos, y sin embargo ahora estoy en el dique seco. No puedo ponerme a leer, no puedo, pero cuando pueda, que podré, los tendré muy en cuenta.

Anónimo dijo...

De acuerdo que en las bibliotecas hay literatura abundante y para escoger, en cuanto a las recomendaciones para el gusto no hay color, somos muy diversos y no a todo el mundo le gusta lo que a uno.
Y cierto, la publicidad a veces es engañosa.
Mis asludos.

Anónimo dijo...

Como estoy poco leída...me vale con los "infumables" soy ASIN.

chalyveragmail.com dijo...

Yo leo libros de cuarta mano, a Ulises lo espere cerca a diez años, es que por aca los libros tienen precios escandalosos.
Tienes razon la mayoria de los libros de moda no sirven para nada y a veces es preferible volver a leer Cien años de soledad por septima vez.

Besos

mjromero dijo...

Hoy me ha dejado boquiabierta una noticia en la que se decía que el sr. Bono ganó o gana en derechos de autor, al año, unos 35.000€,más o menos, no recuerdo la cifra exacta.
Lo titularía: 'bonanza'.
Y para reírme, me he reído a carcajadas, hace años con 'mi familia y otros animales' de Gerald Durrell, sin pretensiones literarias, pero historias ciertas vividas por la familia Durrel.
Si no lo has leído y quieres reírte un poco...

yo misma dijo...

El otro día discutía con un amigo..estudiamos juntos..¡filología!(aunque luego mi camino fue otro) sobre el flaco favor que hacen las editoriales, no sé si todas, pero en una gran mayoría sí, a la literatura. Su problema era que en estos tiempos habían bajado las ayudas de la administración y con ello corrían peligro( él trabaja en el mundo editorial), no le preocupaban las letras..sino la economía..no pasa nada si ese dinero se invertía en libros que compraba dicha administración y se pudrían en sótanos..ni siquiera se molestan en donarlos..pero claro, ¿merecerían ser leídos?..mi problema era qué filtro debe pasar hoy día un texto para ser publicado.. para que tenga cierta calidad literaria..¡¿cómo es que hasta a mí se me propone que si escribo algo se me puede publicar?!Y claro..los intereses eran distintos..y no nos pusimos de acuerdo. Y luego nos echamos las manos a la cabeza pensando en qué se gastan el dinero nuestros políticos por nosotros..pues este es sólo un ejemplo..y encima..no es lo único que estropean con ello.
Yo sigo visitando bibliotecas..Un saludo.

Mari Triqui dijo...

Pues yo el año pasado me compré el libro electrónico y me descargué todo lo que encontré de tu lista "LIBROS QUE NO SE TE PUEDEN ESCAPAR". En serio. Y hasta ahora tus recomendaciones no me han defraudado.
Gracias y besos.

Esilleviana dijo...

Debo confesarte que me dejo llevar por el boca a boca. Me topé con Los ojos amarillos de los cocodrilos y, a pesar de que me costó terminarlo, me aburrí en la mitad del libro, pasados unos meses volvía cogerlo y conseguí acabarlo, pero sin duda no deja ningún poso cuando finalizas la lectura, ninguna reflexión que permita catalogarlo como un libro que merece la pena leer... por tanto, debo de seguir tus recomendaciones literarias y pensaré en Resurrección, para el próximo.

:)
un abrazo

Anónimo dijo...

¿Olvidas que vivimos en el país dónde , por ejemplo, la Preysler compra libros con lomo rojo ya que le va de PM con la decoración, o nos sorprendemos y es noticia que la Esteban salga en una revista con un libro en la mano ¿por cierto, estaba al derecho?..ó los papás protesten porque recomiendes a los Reyes un libro, quitamos dinero para la Wi, o videoconsola, o juguete way de turno que tiene la vecina. ¡¡ caraí con la crisis que hay y recomendar "eso" con el IVA que tiene!!!...?
Visto lo visto ICO, si alguien lee ese objeto con hojas que no es un árbol y del que siempre se aprende algo..aunque sea a deshecharlo ya es un logro..¿no crees?
Buena lectura...
La Bohëme

Anónimo dijo...

upsss la h es muda pero no ciega...

Entre el ipot de mi pareja, el niño con el MP4.+, la niña con la play, la abuela con la termo mix,el abuelo con la muñeca hinchable de última generación, el pájaro con el busca y yo además con el ordenata pórtatil..Una pierde las "h" por cualquier sitio..(espero lo comprendan),ayyyy
Bohëme

Raquel dijo...

Las recomendaciones de amigos y demás son una de las mejores formas de no errar mucho y conseguir leer buena literatura. Lo de la mala... ¡Qué decir que no hayas dicho! Sí, todo es cuestión de gustos, pero los libros basura, la comida chatarra, la mala música o la mala televisión siempre se vende a un precio muy alto: enriquece ciertos bolsillos y enferma mentes, cuerpos y corazones.

ISA dijo...

uFFF, que tema más delicado.
Desgraciadamente mucha gente busca en algunos libros lo mismo que buscan viendo realitys: olvidarse de la realidad. Me parece a mi.

Yo pocas veces, independientemente de mi web, me atrevo a recomendar algún libro porque, en el fondo, no se a quién se lo estoy recomendando.
Sin embargo estoy totalmente de acuerdo con mjromero. Por favor no perderse la trilogía de Gerald Durrel, es tremenda, sobre todo los dos primeros. Además están en libros de bolsillo, o sea, baratitos.

Maga h dijo...

Aja...con ganas de ir a tu biblioteca. Acá ya asoma la primavera y las ganas de playa empieza a crecer!
Beso!

Belén dijo...

Yo si que voy a seguir comprando libros, es mi adicción...

jo...

Besicos